Celebra el verano, días soleados y noches estrelladas. (Gooseberry Patch)

jueves, 12 de marzo de 2015

COMIDA SALUDABLE EN NUESTROS HIJOS






No importa si nuestro hijo es un niño pequeño o un adolescente, se pueden tomar las medidas necesarias para mejorar la nutrición y formar buenos hábitos alimenticios. 




Las  mejores estrategias son éstas:
Establecer un horario regular para las comidas en familia.
Servir una variedad de alimentos y bebidas saludables.
Darle un buen ejemplo siguiendo una dieta nutritiva.
Evitar las peleas por la comida.
Involucrar a los niños en el proceso.


Sugerencias para incorporar las estrategias a la rutina.
Comidas en familia
Comer en familia es una costumbre agradable tanto para los padres como para los hijos. A los niños les agrada la previsibilidad de las comidas en familia, y los padres tienen la oportunidad de ponerse al día con sus hijos. 

                                                                    Los niños que participan en comidas en                                                                                 familia con regularidad presentan estas                                                                                  características:

es más probable que coman frutas, vegetales y cereales
es menos probable que tomen poco saludables
es menos probable que fumen, usen marihuana o beban alcohol
Por otra parte, las comidas en familia ofrecen la oportunidad de presentarle al niño nuevos alimentos y de que demos el ejemplo llevando una dieta saludable.

Los adolescentes no se entusiasman con comer en familia , con su deseo de independencia, pero todavía desean los consejos y la opinión de sus padres, por lo cual la hora de la comida en familia debe usarse como una oportunidad para reconectarse. 

Probar con estas estrategias:

Permitir que el adolescente invite a un amigo a comer.
Involucrar al adolescente en la planificación de la comida y la preparación.
Hacer que la hora de la comida sea un momento agradable y donde uno se sienta a gusto, sin discusiones o sermones.

Abastecerse de alimentos saludables
Los niños, en especial los más pequeños, comen sobre todo lo que está disponible en la casa. Por eso, es importante controlar las provisiones: los alimentos que sirve en las comidas y los que tiene a mano para colación. 
Sugerencias básicas:
  • Incluir frutas y verduras en la rutina diaria, un mínimo de cinco porciones diarias. Tener a mano frutas y verduras listas para comer. 
  • Facilitar que el niño elija colaciones saludables, ej. el yogur, los tallos de apio con mantequilla de maní o las galletas integrales con queso.
  • Sirvir carnes desgrasadas y otras buenas fuentes de proteína, como el pescado, los huevos y las frutas secas.
  • Comprar panes integrales y cereales, para que el niño ingiera fibra.
  • Limitar el consumo de la grasa, evitando las comidas fritas y cocinando los alimentos en el horno, en la parrilla o al vapor. Eligir productos lácteos de bajo contenido graso o descremados.
  • Limitar las comidas en restaurantes rápidos y los colaciones poco nutritivos, como las papas fritas y los dulces. No  eliminar por completo, pero ofrecerlos “de vez en cuando” para que el niño no se sienta privado por completo de ellos.
  • Limitar las bebidas dulces, como las gaseosas y las bebidas con sabor a fruta. En cambio, sirvir agua y leche descremada.

Cómo dar un buen ejemplo


La mejor manera de estimular al niño a comer  saludable es dando el ejemplo. Los niños imitan a los adultos que ven a diario consumir comidas nutritivas.
Otra manera de dar un buen ejemplo es limitando el tamaño de las porciones y evitando comer de más. Hablar sobre el estar satisfecho, ej “esto está delicioso, pero estoy satisfecho y no voy a comer más”. 
De igual modo, los padres que siempre están a dieta o quejándose de sus cuerpos pueden fomentar estos mismos sentimientos negativos en los niños. Tratar de mantener una actitud positiva en  la comida.

No pelee por la comida


Es fácil convertir la comida en una fuente de conflicto. Los padres bien intencionados pueden encontrarse en una situación en la que negocian con los niños o los sobornan para que coman alimentos saludables. Una mejor estrategia es permitir que los niños tengan cierto control, pero también limitar los tipos de alimentos que tienen en la casa.
Los niños deben decidir si tienen hambre, qué desean comer de los alimentos que les sirven y cuándo se sienten satisfechos. Los padres controlan los alimentos disponibles para los niños, tanto a la hora de la comida como entre las comidas. 
Pautas que puede seguir:
  • Establezcer un horario para las comidas y las colaciones .Está bien elegir no comer cuando tanto los padres como los niños saben a qué hora es la siguiente comida o colación.
  • No obliguar el niño a comer toda la comida en el plato. Eso les enseña a seguir comiendo aunque se sientan satisfechos.
  • No sobornar o recompensar a los niños con la comida. Evitar usar el postre como recompensa por haber terminado la comida.
  • No usar la comida como demostración de amor. Demostrar amor abrazando a los niños, dedicándoles un tiempo o elogiándolos.

Involucrar a los niños


A la mayoría de los niños les agrada participar en la selección de los alimentos que sirven en las comidas. Conversar con ellos sobre las diferentes opciones y la planificación de una comida equilibrada. Algunos niños quizá deseen ayudar en la compra y en la preparación de los alimentos. En el supermercado, enseñar a los niños a leer las etiquetas para que comiencen a aprender sobre los valores nutritivos.
En la cocina, asignarles a su hijo tareas apropiadas para su edad de modo de evitar que se lastimen o se sientan abrumados. Al final de la comida , no se olvidar de elogiar al cocinero.
Los almuerzos escolares también pueden servir de aprendizaje para los niños. Se puede lograr que ellos comiencen a pensar en lo que van a almorzar, sugerirles que digan qué tipos de alimentos les gustaría comer en el almuerzo o vayan juntos al supermercado para comprar alimentos saludables que puedan llevarse a la escuela.
Otra buena razón para involucrar a los niños es prepararlos de modo que tomen buenas decisiones en lo que respecta a los alimentos que comen. Eso no quiere decir que repentinamente su niño preferirá una ensalada a las papas fritas, pero los hábitos alimenticios que elijamos le ayudará a formar en el presente pueden encaminarlo hacia decisiones más saludables por el resto de su vida.

2 comentarios:

  1. Un post interesantisimo Abril. Gracias por compartir.
    Besos

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  2. Cuando tenemos hijos es bueno aplicar al menos un tanto de estos consejos, hoy la familia está muy desmembrada.. besos

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